20 febrero 2007

Extrex

El día a día nos lleva normalmente a un estrés continuo, pensando siempre en cual será el paso siguiente a seguir, a mejorar con cada paso e intentar no equivocarnos en nuestros actos ya sean en la vida profesional o personal. Pero en algún momento nos paramos en seco, son esos momentos en que somos capaces de detener nuestro tiempo mientras el resto de personas siguen con sus vidas. Quizá pensemos que estos son simples pérdidas de tiempo o momentos para recuperar las energías gastadas o intentar recuperar el ritmo que hemos perdido de golpe.

La mejor forma de entenderlo sea mirarnos a nosotros mismos, pensar en ese momento de la semana que nos ha obligado a bajar las revoluciones provocado por una visión, por un agobio, por un recuerdo que nos detiene y miramos atrás intentando entender que ha sucedido que ha desencadenado ese estado... pero desgraciadamente normalmente descubrirlo no es tan sencillo, pues son una gran cantidad de situaciones y “problemas” que nos llevado a ese estado de animo.

En mi caso ha sido un día un tanto complejo, donde cada vez observo que mis responsabilidades aumentan y obviamente no puedo controlarlo todo, debería aprender a delegar en el resto de mis compañeros, pues me tengo que convencer que no estoy solo y que son tan o más capaces que yo.

Después de darme cuenta he realizado aquel ejercicio tan sencillo de sentarme y mirar al horizonte, pensar en mi vida y todo ello con el máximo de calma, respirando de forma continua y a un ritmo tranquilo, de esta manera puedes relajarte y pensar en la mejor solución, el efecto en mi caso ha sido inmediato pero claro mis “problemas” son tan grandes como yo los quiera hacer… sin duda a mi me funciona.

2 comentarios:

Cereza dijo...

Cada uno tenemos nuestra manera de encontrar alivio a esta vida que tanto nos puede llegar a estresar. A mí por ejemplo me relaja mucho rascarle las orejas al Danko y ver su cara de felicidad :) Me doy cuenta entonces de que la vida está hecha de pequeñas cosas y que todo es relativo.

Por cierto,y con todo mi respeto, ¿quien c--- es este tío que escribe cosas raras? no le entiendo ná

Galudo dijo...

Ni idea